La compañía Colectivo Sonder tiene en escena desde el pasado diez de septiembre un montaje escénico que representa a la tradición oral de los Comcaác sobre las estrellas Cooamc (mujeres). Es sabido que los Comcaác son una etnia que según su historia y su nula relación genética con las otras etnias sonorenses, se dice que en la época de la prehistoria emigró a Sonora, después vivieron por miles de años como una tribu nómada.
En la historia actual se sabe que se establecieron apenas hace 65 años en la Isla del Tiburón y sus alrededores. La palabra significa en su lengua materna “gente” aunque esta etnia es mayormente conocida por todos nosotros como Seris, que así es como los Yaquis los nombraban y significa ‘La gente de la arena’. Con la resistencia a los cambios, esta etnia ha conservado su cultura, su cosmogonía, sus tradiciones, y con su tradición oral se ha ido transmitiendo su historia y su cultura a las nuevas generaciones. Entre las celebraciones principales de los Comcaác está el inicio de año nuevo, esta celebración es cada día primero de julio y lo llaman icoozlajc iizax lit.
En este festejo se hacen distintos rituales propios de la etnia, entre ellos está el ritual dedicado a las Cooamc (mujeres) en donde agradecen a las tres estrellas azules que se encuentran en la Constelación de Orión por avisar que ya empieza la temporada de lluvia, las mareas altas y el nacimiento de los frutos del desierto. Me informé a través de redes sociales sobre este evento “Cooil-Azul” del Director Julio Perea Guillen y me interesó conocer un poco más de esta etnia sonorense y tomé la decisión de asistir. Esto fue el pasado 18 de septiembre en la casa de la Cultura de Hermosillo se presentó este montaje escénico llamado Cooil, que en nuestro lenguaje sería llamado azul.
El Teatro Íntimo Xicoténcatl Gutiérrez que se ubica dentro de este recinto, tiene una capacidad para aprox. 60 personas, lamentablemente no existen en Hermosillo 60 personas que estén decididas apoyar a conservar los espectáculos culturales, ésta función tuvo solamente 8 espectadores. La función estaba programada para las siete de la tarde, me di la tarea de ser puntual y estuve diez minutos antes del inicio, sin embargo me anunciaron que tendríamos que esperar 15 minutos más. A las 19:15 horas nos avisaron que ya podíamos entrar al teatro, al hacerlo, rápidamente se pudo sentir una atmosfera mística: el aroma a incienso era demasiado profundo, la oscuridad dentro del teatro era tenebrosa, sabía que iba a una presentación pero en esos momentos me mantenía expectante. Dos minutos después dio inicio la función.
El escenario era invisible por la oscuridad que había, en los últimos asientos de las esquinas izquierda y derecha, se encontraban dos jóvenes mujeres, cada una con una taza con incienso prendido, su cabeza un poco inclinada como haciendo una reverencia. De pronto empezó un canto en lengua Seri, se podía percibir que alguien lo estaba cantando en el escenario, pero después me di cuenta que era una grabación de fondo para ambientar las voces de las jóvenes que decían: “La Tierra sigue viviendo, sigue sintiendo, y nos dice que sigue hablando, y a partir de ahí nacen los colores”, eso lo empezaron a decir en voz baja, lo repetían y terminaron casi gritándolo mientras caminaban hacía el escenario. Las luces poco a poco se iban encendiendo para poder ver la función. Mitsuki Takaya, Alejandra Abascal y Cristina Vázquez, dieron vida a las estrellas Cooamc vestidas con falda larga de color negro y blusa de color piel. Cada una portaba una túnica que las cubría: Mitzuki portaba una roja; Alejandra una blanca; mientras la túnica de Cristina era de color azul. Estos colores son significativos pues pertenecen a los colores de la bandera de la Nación Comcaác.
La escenografía en gran parte fue un cuadro fabricado con palos secos, dicho cuadro estaba cubierto por ramas naturales aún verdes, que sin duda alguna ayudaban al olor que se respiraba en el teatro. Durante la función las tres jóvenes contaban la historia de las cooamc y para ello utilizaron escenografía que las hacía simular que eran mantarrayas, se apreciabacomo si estuviesen fabricadas con plástico blanco, como el tipo de plástico de un galón de agua. También usaron cabezas de venado fabricadas con el mismo material. Las actrices simulaban ser las mantarrayas y venados mientras la historia era narrada. Lo más maravilloso de usar esa escenografía tan sencilla fue el uso que le dieron. Parecía magia lo que lograron hacer entre la oscuridad, con unas pequeñas lamparitas que portaban en su frente hacían brillar a las mantarrayas.
En verdad imaginabas que las veías nadar dentro del mar, al igual que les daban vida a los venados y podías ver como se cuidaban entre ellos para poder tomar agua. Una vez que ya habían presentado la historia, voltearon el cuadro había una manta y en ella proyectaron un vídeo en el que se contaba el abuso sexual y cómo salieron de su trauma mujeres de la etnia. Para esos momentos con todo lo que ya habíamos presenciado se podía sentir una energía que te erizaba la piel, a mí me sucedió en más de una ocasión, cuando nos mostraron el vídeo la sensibilidad del público estaba flor de piel, previo a esto las actrices se tapaban entre ellas con sus túnicas toda su cara, ellas luchaban en contra de eso, más no pudieron ganar, cuando sus caras estaban completamente cubiertas se proyectó el vídeo. Al terminar el vídeo las actrices se descubrieron sus caras, se formaron y caminaron, dirigiéndose hacia atrás del escenario, para después salir agradecer a la audiencia y dar por terminado después de 30 minutos el montaje escénico.
El montaje duró media hora, pero las emociones que te transmite esta puesta en escena duran por supuesto mucho más que eso, es sólo una representación de una tradición oral de las muchas que tienen los Comcaác, son una etnia rica en historias y tradiciones que los han puesto en los ojos de todo el mundo. Lo que más impacta en esta presentación es como aprovechan el espacio para mostrar a la audiencia una reflexión que ayude a sensibilizarnos contra el abuso del poder, el racismo, y muchas otras situaciones que padecen nuestras etnias.
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